Conoce algunas de las claves de éxito de la universidad de Connecticut
Si nos ponemos a hablar de baloncesto universitario es inevitable hacerlo de la UConn, cuna de grandes jugadoras (Diana Taurasi, Sue Bird o Breanna Stewart, entre otras), y el principal rival a batir. De hecho, suma ya 90 victorias de manera consecutiva.

El equipo dirigido por Geno Auriemma, también seleccionador de Estados Unidos, está a un paso de hacer historia ya que de conseguir la victoria se situaría con la racha ganadora más larga de toda la historia de la NCAA incluyendo también al baloncesto masculino. Pero, ¿cuáles son las claves del éxito de las Huskies?
1. Reclutar a jugadoras de alto nivel se ha convertido en una fórmula autosostenible
Se ha escuchado infinitas veces. Auriemma y su equipo no buscan reclutas talentosas. No quieren a jugadoras que no cumplan con los valores de UConn como son la disciplina, el trabajo en equipo, la responsabilidad y buena actitud.
Esta cultura, trabajada desde hace tantos años, ha hecho que la cultura de excelencia de la UConn sirva como un imán para este tipo de jugadora específica que sostiene a la universidad. La principal jugadora que ha llevado a las Huskies a este escandalosa racha ya no forma parte del equipo pero sus valores sí. Es el legado que ha dejado Breanna Stewart, una de las deportistas universitarias más exitosas.
2. El balance entre competitividad e intensidad establecido por Auriemma
A pesar de haber ganado tantos títulos, Auriemma no ha perdido su deseo de alcanzar la perfección. Y esa intensidad la ha mantenido durante los últimos seis años tanto dirigiendo a UConn como a la selección de baloncesto femenino de Estados Unidos con la que ha conseguido dos medallas de oro olímpicas (Londres 2012 y Río 2016) y dos oros mundiales (República Checa 2010 y Turquía 2014).
3. Las Huskies no han tenido demasiados desafíos en estos años
Desde que UConn ganara el primero de sus once títulos en 1997, solo ha habido dos equipos que le han puesto complicadas las cosas a las Huskies: Tennessee y Notre Dame. Las Lady Vols (Tennessee), dirigidas hasta 2012 por la fallecida Pat Summitt, no se han enfrentado a las Huskies desde 2007. ¿Hubiera cambiado la racha de UConn de haberse enfrentado a las Lady Vols?
¿Y qué hay de Notre Dame? Pues entre 2011 y 2013 ganaron siete de los ocho partidos en los que se enfrentaron pero desde entonces, UConn encadena seis victorias consecutivas. De hecho, desde la temporada 2007 solo cuatro equipos han conseguido derrotar a las Huskies: Stanford (tres veces), Baylor (dos) y Rutgers y St John’s en una ocasión cada uno.
¿Esto quiere decir que el baloncesto femenino en la NCAA no es competitivo? No, no es así. Al contrario, si dejamos fuera de la ecuación a UConn, sería difícil prever cuál de los equipos podría ser el ganador del campeonato nacional.
4. La mayoría de rivales de UConn saben que van a perder contra ellas
Ese es el efecto que parece producir el equipo dirigido por Geno Auriemma ya que muchos de los rivales juegan peor contra UConn o por lo menos durante una parte del partido debido a la gran presión que ejerce el poder derrotar a una equipo prácticamente imbatible e insuperable.
5. «Once a Husky, always a Husky»
Las Huskies juegan a un nivel que parece más cercano a la WNBA que al baloncesto universitario. Una de las mayores quejas que se escuchan alrededor del baloncesto femenino universitario por parte de los entrenadores es que las jugadoras son más físicas que nunca pero los fundamentos se han ido diluyendo. Específicamente el tiro, el pase en ataque y la posición y al disciplina en defensa.
¿Y cuáles son las características del juego de UConn? Precisamente aquellas que demandan los entrenadores. Buenos pases, un alto porcentaje de acierto en el tiro. No hacer faltas en defensa y jugar siempre duro independientemente del tanteo y del tiempo que quede. Auriemma demanda estas cosas pero las jugadoras también y lo hacen siendo responsables cada una de la otra.
Y lo seguirán haciendo para seguir sumando récords.